4/5/12

Resumen Completo "Rebelión en la Granja" de George Orwell

En la granja Manor, propiedad del señor Jones, vivían muchos animales, y entre ellos el cerdo Viejo Mayor, quien era respetado por todos. Una noche él citó a todos los animales para hablar con ellos de un sueño que había tenido. Les habló acerca de la rebelión que debería realizarse algún día en contra de los humanos, quienes eran los únicos seres que consumen sin producir, explotaban a los animales y los usaban en beneficio de ellos. También les enseñó la canción “Las Bestias de Inglaterra”. A los pocos días el Viejo Mayor murió. Todos los animales hacían reuniones secretas para organizar la rebelión. A cargo del grupo de animales se quedaron los cerdos: Snowball y Napoleón. Un cerdo, muy hábil en hablar y convencer con sus discursos era Squealer y se decía que él podía hacer ver lo negro, blanco. En las reuniones, los cerdos tenían que luchar contra los demás animales, quienes a veces defendían al Sr. Jones (convencidos por Moses, el cuervo negro predilecto de Jones) o si no ponían escusas por miedo a lo que podía pasar después. El señor Jones había tomado como hábito beber mucho, así es que un día no les dio de comer y los animales, sin ningún plan se rebelaron contra Jones y sus hombres, quienes tuvieron que huir de la casa junto con la Sra. Jones y Moses. Los animales durmieron esa noche como nunca, a la mañana siguiente todos celebraban la libertad. Cantaron “Bestias de Inglaterra” y formularon los 7 mandamientos del Animalismo: 1- Todo lo que camine sobre dos pies es enemigo, 2- Todo lo que camine sobre cuatro patas o tenga alas es un amigo, 3- Ningún animal usará ropa, 4- Ningún animal dormirá sobre una cama, 5- Ningún animal beberá alcohol, 6- Ningún animal matará a otro animal, y 7- Todos los animales son iguales. Se pusieron a trabajar y a terminar de hacer el trabajo mucho antes que los hombres lo hacían en antaño. El que les daba fuerzas a los demás animales para  seguir era Bóxer, un caballo medio tonto pero muy fuerte, que siempre decía “Trabajaré más fuerte”. Dictaban cursos entre los animales para aprender a leer y a escribir. Hacían reuniones todos los domingos para planificar el trabajo de la siguiente semana, alzaban la bandera verde que tenía una pezuña y cantaban “Bestias de Inglaterra”. Había rumores de que Jones y sus hombres iban a intentar recuperar la granja. Ese día llegó, Jones entró con una escopeta y los otros cuatro hombres con palos: las aves les cacaron encima y les picotearon, algunos animales les pegaron y en el Establo de las vacas les terminaron de dar su pisa. Snowball salió herido en la espalda y 3 animales murieron. Los animales ganaron otra vez. Los animales mandaban a las palomas para que divulgaran la noticia de la rebelión animal.  La granja tenía dos granjas vecinas: una era Pienchfield y la otra era Foxwood. La gata faltaba algunos días a trabajar cosa que era muy rara y Mollie (la yegua joven y vanidosa) llegaba tarde a trabajar porque esperaba a que un hombre de la otra granja le diera terrones de azúcar. Clover (la yegua adulta) la vio y le reclamó y Mollie huyó de la granja. Las 2 perras: Jessie y Bluebell, habían parido 9 cachorros, quienes fueron alejados de su madre para recibir la educación de Napoleón. Para algunos animales era difícil aprenderse los 7 mandamientos de memoria, por eso sólo se memorizaron <cuatro patas sí, dos patas no>.  En la granja todo era tranquilidad, a excepción del continuo desacuerdo entre Napoleón y Snowball, siempre discrepaban en todo. Snowball dio la idea de que se construyera un Molino de Viento para economizar trabajo, ayudarse con la fuerza del molino y trabajar sólo 3 días a la semana; pero, como siempre, Napoleón estuvo en contra. Hicieron campañas para decidir el domingo que venía si se iba o no a construir el molino, además Snowball tenía ya los planos hechos. El domingo llegó, todos esperaban la votación del molino, pero, a la hora de votar aparecieron 9 perros salvajes mostrando sus colmillos, junto a Napoleón. Él dio un grito y los perros le fueron siguiendo a Snowball para matarlo, pero él logró escapar y nunca más se supo de su paradero. El molino aparentemente quedó inconcluso, pero todos quedaron con la conmoción de lo ocurrido. Al domingo siguiente, Napoleón les dijo que el molino se iba a construir, todos estaban confundidos, pero Squealer les convenció a todos de que Snowball le había robado los planos a Napoleón, pero que N. siempre había estado de acuerdo con el molino. Comenzaron a levantar falsas acusaciones de Snowball, dijeron que él estaba aliado a Jones desde el principio. El molino comenzó a construirse con piedra que, previamente tenían que romper. Bóxer, como siempre, era el más fuerte y el que nunca se rendía, aunque Clover a veces le advertía que no se esforzara tanto, él no le hacía caso. Napoleón contrató a Whymper, un pequeño hombre que los ayudaba a conseguir materiales para el molino. También negociaba la venta de madera con uno de los dueños de las granjas aunque no decidía a quien vender. Un día, sin explicación alguna, los cerdos y los perros se mudaron a la casa grande y dormían en las camas, nuevamente Squealer convenció a los demás animales de que era lo más conveniente. Una noche hizo tanto viento que hasta las tejas de los pesebres se levantaban, hasta que oyeron un estruendo como un cañón, todos salieron a ver y vieron un terrible espectáculo: el molino se había desplomado. Todos se retiraron a dormir y a la mañana siguiente, Napoleón convenció a todos que Snowball entraba a la granja por las noches y que él, aliado a animales traidores había derrocado el molino. Obligó a confesar a algunos animales que se encontraban a escondidas con Snowball en las noches y los hizo matar con los perros. Los animales recomenzaron la construcción del molino de viento, pero esta vez haciendo las paredes el doble de grueso del que estaba. Estaban en pleno invierno y escaseaba la comida. Napoleón ordenó a las gallinas que entregaran los huevos que pusieran para venderlos. Una noche, Clover, Muriel (la cabra) y otros animales se pusieron a cantar “Bestias de Inglaterra”, cuando Squealer se acercó y les dijo que ya no debían cantar nunca más esa canción , pues era de rebelión y ellos ya no tenían porque rebelarse. Napoleón ya no era visto en las reuniones del domingo, sino quien daba las órdenes para la semana era Squealer. Terminaron el molino y sólo faltaba instalar la maquinaria. Finalmente, Napoleón vendió la pila de madera a la granja Pienchfield, mientras que hablaba mal de la granja Foxwood. Al entregar el dinero se dieron cuenta de que el dinero era falso!! Entró Jones, el dueño de la granja Pienchfield y 18 hombres con escopeta, mataron a algunos animales y principalmente: destruyeron el molino. Tuvieron que huir perseguidos por los perros, pero ya hicieron lo que querían: destruir el molino. Los animales estaban desconsolados, pero se alegraron de ver que pudieron vencer a los hombres otra vez. Una noche se vieron a los cerdos y a los perros tomando whisky y a Napoleón con un bombín de Jones. Hasta ese momento habían incumplido todos los mandamientos. Había recomenzado la construcción del molino, pero no se avanzaba con rapidez, pues bóxer no podía esforzarse mucho por estar herido. Se acabó el molino y se tenía que volver a ahorrar para la maquinaria. Una noche, Clover se preocupó porque Bóxer sólo se fue a dejar un balde y no regresaba. Fue a ver que pasaba y vio que él estaba tendido en el piso. Llamó a los demás, pero Squealer no venía. Finalmente llegó y dijo que ya había llamado al veterinario. Vino el carro y cuando se iba alejando, Benjamín, el burro viejo, leyó lo que estaba escrito en la camioneta y todos los animales comenzaron a gritar, pues a Bóxer lo iban a matar para sacar provecho de su cuerpo. Bóxer los oyó , pero estaba demasiado débil como para reaccionar. Bóxer murió. Para justificarse, Squealer explicó que el veterinario le había comprado la camioneta al hombre del Matarife de Caballos. Pasaron años enteros y ya todos los animales que habían participado en la revolución estaban viejos, incluso: Bluebell, Jessie y Pincher (los perros), Muriel (la cabra) y Jones murieron. Benjamín y Clover estaban iguales, aunque más canosos. Algunos cerdos también se conservaron iguales, aunque estaban más gordos. Napoleón engordó, tenía algo así como 150 kilos. Había muchos más animales, pues se habían reproducido. El molino no fue utilizado para dar energía eléctrica como se había pensado, sino que se usó para moler maíz; y estaba ya construyéndose otro. Squealer había llevado a las ovejas a un lugar retirado para enseñarles algo. Un cierto día, los cerdos salieron de la casa grande caminando en dos patas!! Las ovejas habían cambiado de frase e interrumpieron las quejas con su balido <Cuatro patas sí, dos patas mejor>. Clover llevó a Benjamín al muro donde estaban pintados los 7 mandamientos y le pidió que le leyera lo que estaba escrito ahí. Benjamín leyó: Todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros. Napoleón y los cerdos ya se vestían con la ropa de Jones, N. ya fumaba pipa, etc., pero ya a ningún animal le pareció extraño esto. Una noche se oyeron carcajadas en la casa, Clover y Benjamín se acercaron a ver que pasaba y se llevaron una gran sorpresa. Los cerdos habían hecho una reunión y había invitado a los humanos!! Napoleón y Pilkington de Foxwood hicieron un brindis por la dominación de los animales y por su alianza. C. y B. se alejaron tristes, pero luego oyeron un ruido y regresaron corriendo. Todo era un desastre, lo que pasó era que se habían puesto a jugar barajas y, Napoleón y Pilkington habían encontrado un par de A´s. Todos gritaban y peleaban, no se distinguían: cerdos o humanos? ...

COMENTARIO:                                                                                                                               El cerdo Mayor nunca quiso que a los demás cerdos se le abriera el apetito de poder y de querer siempre más que los demás, ganar cosas a costa de aprovecharse de los otros. Los animales se dejaron someter en ideas “correctas”. Creó que Snowball sí hubiera seguido el deseo del Viejo Mayor, pero tuvo que huir, ya que Napoleón era un dictador que iba ganando cancha sobre los demás animales. Todo lo que hizo Napoleón fue injusto, se aprovechó de ser descendiente del Viejo Mayor para sacar provecho a la condición de los animales. Algún día caerá la dictadura, ya que no hay mal que dure cien años. El fin de los ideales del Viejo Mayor sobre la revolución, cayó el momento en que Napoleón se dejó vencer por su hambre de poder y cuando la dictadura y las diferencias sociales iniciaron.    Moraleja: El poder corrompe, el poder absoluto, corrompe absolutamente. (Acton)

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